Una compañía de jóvenes bailarines se reúne en un colegio abandonado para ensayar. Dicha compañía da comienzo a una noche de celebración que se convierte en una pesadilla, cuando los bailarines descubren que han estado consumiendo bebidas adulteradas sin conocer al verdadero responsable, el entorno poco a poco se va dejando llevar por el caos, la violencia y el exceso, siendo el detonante de diversas reacciones en el espectador. Todo esto tras una increíble secuencia de apertura dirigida por Benoît Debie quien es el director de fotografía y grabada por el propio Noé.
En esta nueva cinta de Gaspar Noé se nota ese ambiente noventero y electrónico ambienta perfecto el discurso de la época. El guion de la película estaba conformado por sólo tres páginas y se rodó en 15 días. De los 23 bailarines involucrados en la historia del filme, 80 por ciento de ellos no son. Gaspar Noé los conoció de manera casual y los invitó a ser parte de Clímax. A Sofía Boutella, quien es la única actriz profesional, la contactó vía Instagram. Por otra parte Thomas Bangalter de Daft Punk quien ya había trabajado con Gaspar Noé en Irreversible también colabor con parte del soundtrack de CLIMAX.
Mucho es lo que se ha hablado acerca de la cinta,desde opiniones sobre si es brutal, infernal o polémica, otros más la denominan alucinante. Sin embargo es un hecho que Gaspar Noé sabe hacer buen cine y CLIMAX no es la excepción, se podría advertir que la cinta es un amalgama de impresiones que han sido ensambladas de manera que llega a atraparte.
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